SAVALLI. Ivana, La dorna nella societá della Greacia antica, Bologna, Pátron Editores, 1983.
Patricia Mabel Saconi
Como punto de partida para su obra, la autora expone sus consideraciones de los estudiosos del siglo XX sobre el lugar que la mujer ocupaba en la jerarquía social de la Grecia antigua. Esta primera parte resulta útil en tanto expone el estado de la cuestión de manera detallada e incluyendo las citas bibliográficas correspondientes. Los testimonios plásticos (pintura de vasos, escultura) y escritos (documentos históricos), discurso filosófico, tragedia) constituyen el material de análisis, a partir del cual las afirmaciones sobre el rol de la mujer se ubican como intermedias entre dos posiciones extremas: la mujer reclusionista ─según la cual la degradación social de la mujer determinó la decadencia del mundo helénico─ y la tesis opuesta, que sostiene una participación de la mujer más o menos activa, reflejada en el comportamiento de las heroínas trágicas. Al finalizar su exposición, Savalli advierte que existe un dato desconcertante: tanto para rechazar como para afirmar la tesis de la subordinación social de la mujer griega, las interpretaciones se han realizado sobre el mismo material; la variación del punto de vista estaría dada por el “background” de quienes interpretan.
Actualmente, señala la autora, se distinguen dos orientaciones. Por un lado, las feministas americanas que dedicaron dos números de Arethusa (1973 y 1978) a la mujer en la antigüedad. Este grupo concluye en un juicio negativo sobre la sociedad antigua, en tanto masculina, pero Savalli agrega ─citando a M. B. Arthur─ que hay que establecer una diferencia entre la sociedad homérica, en la que la mujer era concebida como un aspecto más de la vida en general, y la sociedad posterior al siglo VI, en la que, con la conformación de la polis, la mujer pasó a ser concebida como un aspecto de la vida del hombre. Por otro, las feministas francesas - trabajando sobre los testimonios escritos (desde los literarios hasta los epigráficos y figurativos)- analizan los aspectos de la maternidad, la erophé, el matrimonio, el adulterio.
Dado que no existe una metodología determinada para realizar el estudio de la mujer griega, Savalli retoma para el suyo la definición de subordinación femenina de Godelier (“Les rapports hommes-femmes: le probléme de la domination masculine”, La condition féminine, Ed. Sociales, París, 1978): “Una realidad social en tres dimensiones: económica, política, simbólica”. Aunque el nivel simbólico ha sido el más estudiado, la investigación debe abarcar los tres aspectos; tampoco existen trabajos que expongan orgánicamente las conexiones entre los niveles. En este punto deberá tenerse en cuenta la existencia de variantes regionales. El material de trabajo estará constituido por testimonios literarios, pictóricos, epigráficos.
El estilo claro y la exposición ordenada permiten acceder sin dificultades a esta obra que analiza un tema ciertamente complejo. La bibliografía en notas y la contenida entre las páginas 267-273 constituyen un importante aporte teórico para la mejor comprensión de los puntos desarrollados.
El análisis propiamente dicho está dividido en dos partes:
a. El cuadro histórico que se subdivide en tres capítulos: El derecho, Vida cotidiana y La ideología de la ‘gyné oikonomos’.
b. Antología, que organiza en tres capítulos el material literario sobre todos los puntos que se han analizado- de la edad arcaica (Hornero, Hesíodo, Semónides, Heródoto, Esquilo), la edad clásica (Epitafios, Sófocles, Eurípides, Aristófanes, Jenofonte, Platón, Aristóteles) y la época helenística (Plutarco).
En el cuadro histórico cada capítulo expone e interpreta el material según un criterio cronológico. En el capitulo primero se realiza el seguimiento de los factores de la evolución del régimen matrimonial y patriarcal, del cual resulta la condición jurídica de la mujer como procreadora de herederos legítimos en el oikos, unidad fundamental de la sociedad agraria arcaica. De todos modos es posible hacer una separación entre el modelo conservador ateniense y el modelo, menos rígido, espartano-cretense.
El capítulo Vida cotidiana repasa el desempeño femenino en las actividades rituales, domésticas (agricultura, panificación, tejido, artesanía, comercio) y liberales (medicina, literatura, sacerdocio). El análisis considera en este punto la existencia de condiciones variables según las clases sociales.
En La ideología de la ‘gyné oikonomos’ la autora parte del mito hesiódico de Pandora y continúa con las figuras siguientes para individualizar la posición de la mujer entre las esferas reproductiva y productiva.
Esta obra merece atención por el nuevo enfoque con el que la autora analiza el tema, de manera objetiva y con el complemento de los testimonios, así como por la revisión de las tradiciones existentes, lo que resulta de gran utilidad para las posteriores investigaciones sobre la jerarquía de la mujer en la sociedad griega antigua.
